El otro día venía escuchando la radio en el coche y sonaba una canción de El Último de la Fila, “Cuando la pobreza entra por la puerta, el amor salta por la ventana”. Hacía años que no la escuchaba, reflexioné sobre su letra y por deformación profesional no pude evitar hacer un símil en el ámbito empresarial:
Cuando la crisis llega a la empresa, llueven “tortas” para los directivos desde todos los flancos, principalmente de quienes les auparon y siguieron: accionistas y empleados.
Debido a la pandemia del Covid 19, se está produciendo una reducción drástica de ventas, problemas operativos y laborales, insolvencias y cierres de empresas, despidos, sospechas de maquillaje de las cuentas anuales (tentación que acecha a los directivos en épocas de crisis), presunta actuación negligente ante la pandemia por no tomar las medidas necesarias para preservar la salud de los empleados…; todo lo cual pone en el punto de mira al patrimonio de directivos y altos cargos, que está quedando más expuesto que nunca.
En países como Estados Unidos, Reino Unido o Alemania, ya se han iniciado acciones colectivas contra Consejos de Administración con el argumento de que emitieron información incompleta con respecto al Covid19.
Las pólizas de seguro de D&O (Directors and Officers) protegen a la propia sociedad y al patrimonio de los ejecutivos ante posibles reclamaciones de terceros -proveedores, clientes, empleados, accionistas,… –por los perjuicios ocasionados a estos, en el ejercicio de sus funciones –adquisición de empresas, filiales, financiación, compra-venta de inmovilizado, gestión de recursos humanos, gestión de la responsabilidad social corporativa y de la reputación, riesgos laborales (homicidio empresarial), …
En la actualidad y debido a la crisis del Covid 19, la litigiosidad se está disparando y las aseguradoras están encareciendo las primas de estos seguros hasta un 25% en el rango pyme y micropyme, dependiendo del sector de actividad y de su capacidad de recuperación a corto plazo. Para medir el impacto de la declaración de pandemia por el Covid 19 en la empresa, la aseguradora está incorporando en el cuestionario previo a la contratación de la póliza, preguntas sobre la puesta en práctica de planes de contingencia y mitigación ante la pandemia y sobre la cuantificación del potencial impacto en la empresa (mejor y peor escenario).
También se están incorporando restricciones como la exclusión ante insolvencias, para los sectores más afectados como el ocio , el turismo, hostelería o transporte de personas.
A pesar de este endurecimiento del sector asegurador, estamos viendo un mayor interés en la contratación de este seguro por parte de las pymes, con nuevas contrataciones, e incluso aumentando los límites de cobertura en las renovaciones anuales.
Al mismo tiempo, observamos en las pymes
- Una mayor concienciación para poner en marcha planes de contingencia y mitigación como consecuencia de la pandemia, poniéndolo en conocimiento de todos los socios y organismos reguladores que afectan al negocio.
- Cuantificación del posible impacto en el mejor y peor escenario;
- Así como la implantación de la Compliance Penal que exonera a la empresa de una posible responsabilidad penal.
Y es que, ante el panorama que tenemos de incertidumbre, bajada de ventas, oleada de despidos y responsabilidad ante contagios (asunto muy controvertido); las reclamaciones están servidas.
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